6 razones por las que tener una red social corporativa

La digitalización de las empresas no acaba de llegar, pero muchas empresas sí acaban de llegar a la digitalización. Y una parte fundamental de este paso es poner en contacto tu compañía con el mundo 3.0. En este contexto y dentro de la labor del marketing digital y la comunicación, surge la necesidad de crear un canal interno al que llamamos red social corporativa.

Sí, efectivamente, al igual que tener un perfil corporativo en las redes sociales (LinkedIn, Twitter, Facebook, Google+, etc.), contar con una red interna proporciona numerosas ventajas de comunicación y branding para tu negocio. Una red social corporativa es una herramienta muy potente de comunicación, una Intranet dinámica donde la información fluye en tiempo real. De hecho, funciona de manera similar a una red social, pero la principal diferencia se encuentra en que la corporativa se limita a un ámbito cerrado: tu compañía. 

• ¿Por qué tener una red social corporativa?
• ¿Cómo se gestiona?
• ¿Para qué sirve?

Seguro que alguna vez te has hecho estas preguntas, por ello, quiero darte seis razones por las que esta herramienta será clave para trabajar en un entorno colaborativo interno. Si ignoramos esta realidad, estamos perdiendo una oportunidad de oro en integración y colaboración dentro de la empresa.

Se trata de un reto en el que se hace partícipe a todos los miembros de la compañía. 

1. Personalización y Branding

No cabe duda de que el diseño tiene que ir acorde con tu imagen de marca. Cada detalle es importante. ¿Qué supone esto? Todos los empleados y miembros de la empresa interiorizan colores, imágenes, logos, etc. Es importante que el diseño sea claro y práctico para facilitar su visualización y utilidad y que acompañe a tu marca y contribuya al orgullo de pertenencia.

La mayoría de redes sociales corporativas permiten crear grupos en los que incluir determinados perfiles y en los que sólo ellos tendrán acceso a esa información. Por ejemplo: Directores, Departamento de Compras, Producción, Tecnología, Comercial, etc. Esta función resulta muy útil para no molestar con spam a toda la compañía y personalizar los mensajes.

2. Comunicación interna más rápida y de más calidad

Los emails están muy bien, pero es evidente que resulta un canal mucho más lento para comunicar según qué información.

Una red social corporativa permite hacer llegar contenido de manera mucho más rápida y simultánea para todos, por grupos o individualmente. Esta sincronización supone una ventaja competitiva y ahorro de tiempo, gracias a su inmediatez.

Además, fomenta la participación, la colaboracion y el compromiso con la compañía. Se convierte en una comunicación horizontal y más abiera, sin jerarquías, y consigue que todos los empleados socialicen, e incluso conozcan mejor quién trabaja en qué departamento, sobre todo cuando la empresa es grande.

La posibilidad de aprovechar los grupos creados facilita la comunicación rápida, por ejemplo, para el aviso de imprevistos, así como personalizar mensajes y nombrar a los interesados. 

En cuanto al lenguaje, nos permite ser menos formales.

3. Mantiene actualizados a los empleados

La publicación de contenido regular es especialmente útil para determinados departamentos como el de Recursos Humanos, Marketing o Dirección.

La red social corporativa también puede usarse como tablón de anuncios, agradecimientos y logros, noticias o cualquier tipo de contenido que se considere relevante. Además, proporciona más facilidad para encontrar información, permite conectar áreas y recursos, intercambiar buenas prácticas, dar la bienvenida a nuevos empleados, etc.

4. Mejora las capacidades técnicas

¿Estás seguro de conocer todas las herramientas de cada red social? Como he comentado al principio, la digitalización es un paso muy importante en el que esta herramienta ayuda. Los empleados se familiarizan con sus funciones y puede animarles a utilizar las redes sociales externas para compartir contenido.

Por otro lado, al poder usarse desde cualquier dispositivo, se habituan al proceso de digitalización.

5. Permite valorar el ambiente interno

Hacer partícipes a los trabajadores permite saber lo que opinan y encontrar respuestas más rápido. 

Podemos aprender a conocer con quién trabajamos, qué les interesa y qué no. Romper barreras físicas entre departamentos y generar confianza. Pero en este punto también es importante observar cómo interactúan los empleados para entender si está siendo útil. ¿Le da dan a "me gusta"? ¿Comparten? ¿Comentan? En este sentido, es un buen medidor de "orgullo de pertenencia". Cuanta más participación haya, más útil resultará.

6. Aumenta la Productividad

Según un estudio realizado por McKinsey Global Institute, mejorar la comunicación y la colaboración con tecnologías sociales puede incrementar la productividad de interacción de los trabajadores hasta un 25%. La comunicación que proporciona una red social corporativa fomenta la creatividad y la innovación, invita a compartir el talento, facilita la cooperación, debatir sobre decisiones, gestionar y compartir documentos de manera colaborativa.

Todas estas ventajas ahorran tiempo y permiten estar conectados con tus compañeros estés donde estés, pero de una manera lúdica y menos fría e intrusiva que un email.

En definitiva, si aprovechas bien una red social corporativa, puedes conseguir grandes resultados y convertirla en tu mejor aliada para impulsar la comunicación empresarial.  

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